Segundas, Sobrerruedas y Sonambulismos en Ensenada

De Los Globos a Las Segundas: 50 años del comercio independiente

Por Erick Falcón

Luego de décadas de lucha contra corporativos en proveer a la comunidad de frutas, verduras y artículos de primera necesidad, la organización de Comerciantes Unidos de Ensenada se alista para sobrepasar una recesión más y celebrar su 31 aniversario.

A sólo unas cuadras del área que se conoce como Los Globos, que concentra al centro comercial de segundas, los sobrerruedas y el tianguis de la Unión, los comerciantes se alistan para “salir adelante una vez más desde que llegamos en 1978,” asegura Ancelmo Trujillo Contreras, uno de los fundadores sobrevivientes.

A mitad del siglo pasado el comercio independiente de Ensenada comenzó debajo del puente de la Juárez en el arroyo Ensenada, cuna también de las Segundas. En lugar de extenderse hacia Valle Verde y la Coral, los comerciantes se fueron a El Baratillo, entre Águilas y Carranza, y saltaron a diferentes predios entre Marillac, Los Globos y donde estaba El Costeño.

“Nos ofrecían rentado el edificio de la PGJE y no lo queríamos rentado, queríamos donde estaba la Hermenegildo Galeana cuando David Ojeda era alcalde, hasta que en 1978 Luis González Ruiz nos paró el mercado, porque prácticamente invadimos este predio,” dijo Trujillo.

Hoy en día más de 70 familias venden frutas, quesos, aceitunas, ropa y otros artículos en el mercado, que aglutina más de 93 locales en el área.

De los fundadores sólo quedan Trujillo, Alberto Preciado y Raymundo González, que fue quien hizo los puestos que aún se aprecian.

“Toda la vida han querido clausurar el ambulantaje, pero hemos sido aguerridos, y hemos trabajado bien con todas las administraciones, aunque reconozco que soy de filiación priísta,” comentó.

Personaje notable en el deambular del tianguis, Ancelmo Trujillo Contreras vende desde miel, dátil y aceitunas hasta peculiaridades como vino de San José de la Zorra, y pocos imaginan que es el secretario general de la Alianza Ensenada de Comerciantes Fijos, Semifijos y Ambulantes, A.C.,organización que aglutina a casi todos los comerciantes independientes y se cuentan por los cientos.

Mencionó que los mayores obstáculos del sector comercio no son ellos, ya que muchos están debidamente registrados como contribuyentes, a lo que sacó enseguida su kárdex de pequeño contribuyente del gobierno estatal.

“Todos inclusive nos van a tachar por ser el comercio que ellos llaman informal, pero lo que ha encarecido todo son los altos costos de rentas, los servicios, si se sube el predial va a ser un caos, los único que deben de amarrarse la tripa en todo caso son los legisladores,” indicó.

Aseguró que los que se quejan son los grandes empresarios, que “tienen miedo al enemigo pequeño, hay un dicho que dice que el valiente vive hasta que el cobarde quiere.”

Con haber sobrepasado crisis con López Portillo, de la Madrid y la de 1994, Trujillo afirma que una vez más los comerciantes independientes saldrán adelante si “estamos todos en un solo frente.”

Se muestra reticente a decir el número real de afiliados, a decir “somos cientos,” pero la Alianza agremia a las siete asociaciones de comerciantes independientes, entre las que se cuentan la Unión de Comerciantes Fijos y Semifijos López Mateos, la Unión de Comerciantes Francisco Villa y otras más.

Parte de su visión de comerciante independiente, el secretario general de los comerciantes fijos, semifijos y ambulantes de Ensenada no cree en los supermercados como Soriana, Calimax o Ley, a los que considera “capital golondrino” que siempre se va al DF y no se queda aquí, “por lo que quisiera que regresaran los tiempos de cuando éramos zona libre.”

“Desgraciadamente el Soriana, Gigante y ellos son capital golondrino que siempre se va para allá a México, si ves los tickets su matriz está allá, ¿cuándo se va a quedar en Baja California?”

Al contar con desventajas en el rubro aduanero, asegura que por pasar 12 cajas de calcetines ellos pagan lo mismo en impuestos de importación que lo que pagan los grandes corporativos mercantiles por pasar un contenedor de mercancía.

“No me opongo a la competencia, ésta te hace más fuerte, pero que nos dieran las mismas facultades, ellos pasan contenedores de la misma mercancía, pero los pasan con aranceles mas bajos que nosotros,” indicó.

Las  Segundas, tradición de Ensenada

Otra tradición del comercio independiente es la industria de “las segundas,” tiendas de artículos usados provenientes de EstadosUnidos que han sido el sostén de numerosas familias ensenadenses, tanto los recién arribados como los establecidos.

En la década de 1960, Agripina Rodríguez y su familia venían desde Tijuana los fines de semana a vender artículos de segunda mano debajo de lo que hoy es el Puente de la avenida Juárez, explicó Margarita García, vendedora de la tienda El Chango #2.

Desde ese entonces, la creciente demanda llevó a la familia a extenderse y establecerse en Ensenada permanentemente, y poseen negocios en Valle Verde, Los Globos y Chapultepec.

“Hace 14 años esto apenas empezaba. Hoy desde las maquiladoras hasta donde se extiende la orilla de la carretera ya somos más de 30, y son varias las familias que hicimos de esto nuestro modus vivendi,” dijo Martha Magdalena, una de las primeras comerciantes de esa zona.

La primera “segundita” de Chapultepec, Del Sol, fue fundada por la familia Rodríguez, cuyo origen comerciante se remonta a hace casi 40 años, explicaron comerciantes del sector.

De las primeras cinco “segunditas” que precedieron al “boom” inmobiliario que caracterizó a la Zona Sur en la década de 1990, hoy en día las Segundas de Chapultepec, a la orilla de la Transpeninsular, ya sobrepasan las 30 tiendas.

“Para acá venía el desarrollo en aquel entonces. Para 1990 y tantos eran ya siete segunditas. Ahora son más,” comentó.

Algunos de los locatarios, hoy propietarios de su propia segunda, recuerdan haber sido empleados para los Rodríguez. Pese a las dificultades propias del comercio y la competencia de tianguis y sobrerruedas, han podido salir adelante.

La mayor parte de la clientela es gente humilde, por lo que los precios y disponibilidad de artículos de segunda atraen bastante, pero la competencia de los sobrerruedas y la falta de estacionamiento han traído malos tiempos de venta.
“Con lo de la carretera, que quitó estacionamiento, y lo de los sobrerruedas que se ponen en Pórticos y otros lados, si nos ha bajado la venta hasta 80 por ciento. Ya no es lo que era antes,” dijo a su vez Martha Magdalena.

El “segundeo” genera empleo, aseguran los propios locatarios. Una segunda requiere de al menos cuatro empleados entre vendedores, descargadores, choferes, por no decir carpinteros y demás servicios indirectos.

Sábados y domingos son los días de más movimiento, cuando docenas de personas se aprestan a conseguir sábanas, prendas de vestir, electrónicos o algún sofá que verá un segundo aire en alguna vivienda de Chapultepec.